Año con año, cada uno de nosotros definimos objetivos, propósitos, metas, etc. los cuales son una guía para la toma de decisiones.
Sin embargo, en muchas ocasiones a nuestros objetivos les falta fuerza, sentido, pasión, lo cual difícilmente nos mueve e inspira a lograrlos.
Para que nuestros objetivos sean relevantes a lo largo del tiempo, sugiero que consideremos 3 aspectos para la definición de objetivos:
Define qué quieres lograr, así como el por qué y el cómo
Para definir objetivos relevantes, será importante que empieces por revisar tu visión y cómo quieres lograrlo.
El autor Jay Acunzo habla en su blog acerca de las Anclas de Aspiración, las cuales pueden ser personales o de equipo y con ellas definimos nuestra misión y obtenemos suficiente claridad y dirección para ver nuestro ambiente más claramente. Mis anclas de aspiración deben responder a las siguientes preguntas: ¿cuál es mi intención para el futuro? ¿qué me duele hoy? ¿de qué tengo hambre? ¿cómo visualizo el éxito?
Después define cuáles son tus objetivos y cuáles serán las metas que irás logrando para conseguir ese gran objetivo.
Hablando de objetivos, considera que sean SMART (Specific-Measurable-Attainable-Relevant-Time bound), es decir específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con una fecha de logro determinada.
Si observas que tus objetivos son un “refrito” de objetivos de años anteriores, convoca a una reunión de brainstorming con tu equipo donde cada persona comparta ideales iniciando con la frase “Sería muy bueno que pudiéramos hacer/lograr______”. Recuerda que dos cabezas piensan más que una y trabajando todo el equipo junto, pueden sugerir grandes objetivos que sean de alto impacto para el crecimiento y consolidación del negocio.
Diseña el camino de tu situación actual a tu visión.
Algo muy importante es que ya que identificaste a dónde quieres llegar, evalúes tu situación actual. Así podrás definir el camino de acciones, recursos, habilidades y metas a lograr en el tiempo que determines.
Los objetivos que definas deben ser relevantes, ambiciosos y a la vez realistas. Neil Patel sugiere que sean 1-2 objetivos que impacten la rentabilidad del negocio y de 3- 5 objetivos que sean de apoyo. Algunos se podrán concretar en el corto plazo y otros en el largo plazo. Considerar corto y largo plazo te ayudará a tener un balance entre marketing operativo y estratégico. Tony Robbins, coach internacional, menciona que sobrestimamos lo que podemos hacer en una semana y subestimamos lo que podemos lograr en un año, considera este punto cuando establezcas el tiempo para lograr las metas. Soy Teto Gallegos, Consultor Político y Estratega en Digital